Resulta curioso ver como la derecha mediática cierra filas entorno a Caros Divar, presidente del Tribunal Supremo, ante la acusación de malversación de fondos públicas formulada por José Manuel Gómez Benitez, vocal del Consejo General del Poder Judicial.
Los argumentos de la derecha-mediática para tirar por tierra tal acusación son simple y llamanente que Gómez Benitez es íntimo amigo de Garzón quien fue condenado a 11 años de inavilitación por el Tribunal Supremo bajo la presidencia del señor Divar, así como implicación de Benitez en las bastardas negociaciones del PSOE con la ETA.
Y digo yo ¿Qué tendrán que ver los cojones pa´ comer trigo?
Se trata por lo tanto de un nuevo caso de sectarismo partidista en que el no importa el presunto delito que se cometa o denuncie, sino quien lo pueda cometer.
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